Neveros de la sierra de Guadarrama 2016

¿Hasta qué punto una falta de tendencia en una gráfica indica que no sucede nada?

Última nieve vista desde Madrid en 2016

Como cada año pongo las fechas de la última nieve observada a simple vista desde Madrid capital.  Un año más el registro resulta si cabe anodino en el sentido que no se registra nada anormal desde el comienzo de la serie en 1986. Lo cual no es poco, después del verano del año pasado. Este año lo excepcional ha sido lo tardío de la llegada de las primeras nevadas definitivas, prácticamente toda la nieve acumulada este año 2016 lo ha sido de una única nevada sucedida en febrero con más de 1 metro fue casi la primera de la temporada y prácticamente la última pues aunque luego hubo otras nevadas ya fueron a partir de marzo cuando la nieve ya apenas se acumula.

Ventisquero de la condesa el 14 de julio de 2016 justo tres años después de mi visita y  dos días antes de dejar de ser visible desde Madrid.

Foto cortesía de Giuseppe Giannini

Este año la última nieve vista desde Madrid (Ventisquero de la Condesa) se ha registrado el 16 de julio, lo que supone el 6º mejor registro de la serie. 

Fechas de la primera y última nieve en la sierra de Guadarrama vista desde Madrid o alrededores a simple vista.

El 6º puesto se ha producido porque ha aguantado 77 días desde el 1 de mayo, pero si contabilizamos el número total de días con nieve, suma 242 frente a los 271 del año anterior. Y además la serie contabiliza la suma total de días que transcurren desde la primera nevada hasta la última nieve visible cosa que en la mayoría de los años ha coincidido, sin embargo en los últimos años se empiezan a apreciar cada vez más días sin nieve dentro del periodo, sobre todo hasta que se afianzan las primeras nevadas, normalmente estos días apenas suponía una o dos semanas pero en 2016 ha sido absolutamente excepcional, pues se registraron varios meses completos sin nada de nieve dentro del periodo, noviembre, diciembre, enero y la mitad de febrero. Si tenemos en cuenta este hecho excepcional estaríamos hablando de una temporada con apenas 100 días de nieve lo que resulta un hecho insólito. Pero no he contabilizado esos días sin nieve porque aunque poca, quedaba la suficiente como para ser visible desde Madrid, pero esta próxima temporada comenzaré a contar los días exactos con nieve.

Número de días con nieve en la sierra de Guadarrama desde el 1º de Mayo

Una primavera normal y relativamente fresca ha permitido alcanzar a la escasa nieve que quedaba, fechas dentro de los valores normales. De no haberse producido la gran nevada de febrero y luego esta primavera fresca probablemente estaríamos hablando de una fecha récord, lo que pone de manifiesto lo frágil de este registro.  Pues se mantiene en valores normales casi siempre por alguna casualidad que lo lleva a fechas normales.

En 2013 se superó un récord relativo (pues en los años 50-60 del siglo XX hay comunicaciones orales del ventisquero de la Condesa juntándose con las primeras nevadas otoñales de septiembre en al menos dos años diferentes)  gracias a unas intensas nevadas y una primavera excepcionalmente fresca (que no fría) mientras que años con primaveras absolutamente excepcionales en calor, se mantuvieron gracias a unas acumulaciones de nieve importantes.

Tendencia a largo plazo

Cuando comencé esta serie en 1986 lo hice con intención de averiguar tendencias, pero ha demostrado ser una mala elección pues apenas muestra un ligerísima tendencia  a disminuir, a pesar de un calentamiento más que evidente.

Número de días con nieve en la sierra de Guadarrama. Se contabiliza el número de días desde la primera nieve observada hasta la última, sin tener en cuenta los días sin nieve dentro del periodo.

La fecha de derretimiento de la nieve es uno de esos parámetros no lineales que por diferentes motivos no muestra tendencias y de repente y sin previo aviso colapsa y cambia radicalmente. Además como he dicho anteriormente, la serie no cuenta los días sin nieve dentro del periodo precisamente porque estos no existían, sin embargo para hacer la serie más exacta habría que plantearse comenzar a descontar esos días. Lo que habría producido en 2016 un cambio brusco hacia la baja pues habría que descontar prácticamente 100 días mientras que en la mayoría de años se descontarían entre 0 y 20 días como mucho.

Sistemas no lineales

Este año 2016 no se ha producido este cambio precisamente por esa única nevada y por una primavera “normal” de no ser así podríamos estar hablando ahora de un récord absoluto y posiblemente definitivo por tanto si no ha sido este año será los siguientes. Las fechas de desaparición de la nieve mostrarán un umbral de cambio no lineal probablemente antes de una década. Aunque a la vista de la gráfica parece absolutamente infundado y hasta absurdo pronosticar esta ruptura pero ese es precisamente el gran peligro de los sistemas no lineales, que no se ve llegar el cambio hasta que lo tienes encima, sucede lo mismo que con el hielo del ártico cuya superficie se mantiene relativamente constante pero su volumen disminuye drásticamente cada año, un día el volumen se hará cero y con él la superficie pasará de valores casi normales a cero de forma casi repentina. Quien no me crea que se quede observando del patrón de des-empañamiento del espejo del cuarto de baño al salir de la ducha. Al principio no hay cambios, al rato las esquinas empiezan a quedar limpias pero da la impresión de que el espejo no se desempañará nunca, luego miramos a una esquina para ver cómo avanza y de repente sin que apenas seamos conscientes de ello el espejo está completamente limpio.

Media de 10 años de la duración de la nieve en la sierra de Guadarrama.

Saber interpretar una gráfica

Tal vez lo lógico habría sido medir en volumen de los neveros y no si son visibles desde la distancia. Cuidado con lo que se registra y con la interpretación simplista de las gráficas. Sin ánimo de ser catastrofista, una gráfica que no muestra tendencia cuando todas las demás muestran tendencias claras sólo es indicativo que lo que se está midiendo no es completo. Muchos negacionistas se agarran a este tipo de gráficas y las comentan por activa y por pasiva como su demostración particular de que aquí no pasa nada y son los demás los que están equivocados aunque el resto de gráficas indiquen todo lo contrario. A mí, se me puede acusar de lo contrario, de ver un cambio donde no lo hay. Si me van a criticar no se molesten ya lo hago yo: “no detecta cambios apreciables en una gráfica de 30 años y llega a la conclusión de que hay un cambio profundo.”

Pero no es una conclusión, es una predicción. Para no perder los pies del suelo y no salirse de la realidad sigan siempre un consejo: Las gráficas son representaciones “gráficas” de la realidad (por eso se llaman gráficas) pero lo contrario no es cierto, modificar una gráfica no modifica la realidad, hay que saber siempre muy bien que proceso físico que subyace a una gráfica para no dejarse engañar por ella. No se crean mucho las gráficas de superficie de la banquisa ártica, un día llegarán a cero de forma repentina sin que nadie se lo espere y lo mismo sucederá con la nieve de la sierra de Guadarrama.

Giuseppe Giannini me envío este vídeo justo dos días antes de la desaparición del nevero del Ventisquero de la Condesa, tomado el 14 de julio de 2016.