Sector central
En esta zona los glaciares tenían un gran espesor, llegando el hielo prácticamente hasta las crestas en la parte superior de los circos.
Glaciar de Gredos
Es el más complejo y de mayor tamaño de toda la sierra, Comenzaba a los pies del pico Almanzor y terminaba en el prado de Roncesvalles a 1.445 m sobre el nivel del mar.
Tenía por tanto 8 kilómetros de longitud y se alimentaba de tres circos, el Recuenco del Almanzor, la Hoya del Gargantón y la Hoya de Cabeza Nevada.
En lo que hoy es la laguna grande el espesor del hielo estaría entre los 300 y 350 metros. Entre el glaciar del Pinar y el de Gredos existía un glaciar intermedio en el Gargatón que desembocaba en el del Gredos. Este tenía unos 200-250 metros de espesor. En el circo de Gredos son muy visibles las rocas pulidas por la abrasión del glaciar, dándoles su característica forma redondeada. Algunas rocas muestran claramente las acanaladuras dejadas por la abrasión por los cantos arrastrados por el fondo del glaciar.
Lengua
El valle modelado por la lengua glaciar de Gredos se desarrolla en línea recta, excavado entre la Cuerda del Cuento y la Cuerda del Cerro de las Peñas (prolongación del Cervunal), que constituyen las márgenes derecha e izquierda respectivamente.
Depósitos morrénicos
Las morrenas naturales constituyen cordones de bloques erráticos, mezclados con material detrítico, pegados a las vertientes erosionadas por el glaciar, y que señalan el límite entre la pendiente suave e irregular superior y la concavidad perfecta y constante en U. Otro carácter que da visualidad a las morrenas del glaciar de Gredos (igual que el de las Cinco Lagunas o del pinar) es la falta de vegetación en el talud correspondiente al interior del cauce, debida a la poca consistencia de los detritus y a su gran permeabilidad, que hace que el agua se filtre rápidamente a través de su masa.
Así se señalan muy bien la morrena lateral izquierda de Gredos y las dos laterales del glaciar de las Cinco Lagunas. La morrena lateral izquierda del glaciar de Gredos comienza a manifestarse algo al Norte del Cervunal, y sigue a lo largo de la Cuerda del Cerro de las Peñas. Esta morrena libre, y la morrena derecha, libre también, depositada por el glaciar de las Cinco Lagunas, cierran una planicie intermorrénica, de aluvión, con humedad, pastos y turberas, conocida con el nombre de Prado del Cervunal.
Como esta morrena se desarrolla a menor altura que la morrena derecha del glaciar de las Cinco Lagunas, el desagüe del Prado del Cervunal se efectúa en el cauce del río Gredos por el Arroyo del Barquillo. Toda la morrena lateral derecha, es difícil de reconocer, por haberse desmoronado con rapidez, quizá debido a las condiciones estructurales de la vertiente de la Cuerda del Cuento, en la cual los escarpes son frecuentes.
La antigua depresión terminal de la lengua se encuentra en el asiento del lago formado por el dique morrénico transversal, que embalsaba las aguas de deshielo postglaciar. Dicha depresión se acusa actualmente por una pequeña llanura de aluviones, a la cual siguen, más abajo, los angulosos bloques que todavía persisten en serie, como testimonio de la morrena terminal, en la margen izquierda, inmediatamente anterior a los meandros encajados de erosión fluvial de la garganta de Gredos a 1.445 m.
El glaciar experimentó un solo retroceso, sin soluciones de continuidad, en las cuales se formaran nuevas morrenas. Este retroceso sería tan uniforme que desapareció seguramente el glaciar de valle, como tal, y quedó reducido al circo.
Entonces se fragmentaría el antiguo glaciar y se separaron dos glaciares en retroceso: el de Hoya Antón, que terminaría a la altura de los Barrerones y el del gargantón.
Glaciar del Pinar
Era el segundo glaciar más grande de la cordillera después del de Gredos. También tenía tres cuencas de alimentación, la de las cinco lagunas, Pinar y el callejón de los lobos.
Tenía algo más de 6 kilómetros de longitud, terminado en el Venero gordo a unos 1.450 metros sobre el nivel del mar. En su parte más gruesa tenía 300 m de grosor. A lo largo de la garganta se pueden apreciar diversos cordones morrénicos que fue dejando el glaciar en su retirada. Es el glaciar donde mejor se destacan las morrenas laterales, llegando a formar incluso un resalte en la zona del novillero que embalsa una pequeña charca del mismo nombre.
Por lo que respecta al estado de conservación de ambas morrenas, el glaciar del Pinar se caracteriza mucho mejor que el de Gredos, pues son continuas desde su arranque respectivo hasta su confluencia en morrena terminal, que se determina con toda precisión y exactitud.
Arrancan las morrenas laterales a una altura de 1.900 metros y de 220 sobre el fondo del valle, medidos inmediatamente desde aguas abajo del reborde de Las Urraleras. La morrena derecha se inicia en El Ahorcadero, donde terminan los escarpes del Sabinal (Cervunal).
Geográficamente, todo el glaciar del Pinar es más septentrional que el de Gredos. Así sucede que en el Prado del Cervunal, la morrena izquierda del glaciar de Gredos, que le limita orientalmente, apenas se esboza, mientras que la morrena derecha del glaciar del Pinar presenta un segmento libre, el Paredón de Cobos que es un verdadero manto morrénico depositado por la terminación de la lengua glaciar, exhausta ya de la fuerza de erosión.
No se han observado cordones morrénicos intermedios en todo el desarrollo de la lengua, análogamente en el glaciar de Gredos.
Hay indicios muy de la existencia de otro glaciar, al oeste de la garganta del Pinar en lo que hoy es un resalte con unas lagunillas en aquella época debió ser una cascada de serács.
El espesor máximo del hielo en el comienzo de la lengua del glaciar debió de ser de unos 250 metros, calculada enfrente del Prado del Cervunal.
Glaciar de las Hoyuelas del Hornillo
Eran dos glaciares paralelos separados por un espinazo estrecho, apenas alcanzaba 1,5 km de longitud pero han quedado marcadas todas las características típicas de un valle glaciar.
Sector occidental
Glaciar de la Aliseda
Era un glaciar simple de circo sin lengua, comenzaba en el regajo largo y bajaba hasta los 1.870 m
Glaciar de Navamediana
Su cuenca de alimentación procedía de dos circos: la Hoya de Meapoco y la Hoya Rabia, Naciendo entre los 2.300 y 2.400 m en la cuerda del callejón de los lobos. Durante los primeros 5 Km se extendía por el valle del mismo nombre, donde los hielos de ambos circos se unían en la hoya bajera terminando la lengua a unos 1.550 m su espesor medio era de unos 100 m.
Glaciar de Bohoyo
Comenzaba en el circo del Belesar, el cual era su circo principal, la lengua transcurría en dirección Este hacia el Oeste terminando a 1.500 m con un recorrido de 4 km. Terminando en la Hoya del Bollo. Su espesor medio era de unos 100 m. A este glaciar se le unían otros glaciares tributarios, uno procedente del circo de las Serradillas y otro procedente del circo del Pajonal, el cual a su vez era doble.
El glaciar de Bohoyo era un glaciar de ladera, cuya característica principal era su condicionamiento por la pendiente que implica escasa excavación o poco importante, un rápido descenso de los hielos y un corto recorrido.
A su vez en la vertiente Norte de la garganta de Bohoyo se desarrollaron cuatro glaciares más, favorecidos por su orientación septentrional. Estos eran independientes del glaciar principal y se disponían en orientación Sur-Norte. Estos eran:
Glaciar de la hoya del bollo
El glaciar de la Hoya del Bollo comenzaba su circo en la sierra llana, con una longitud de 2,5 km descendía hasta la cota 1.500 m. donde terminaba muy cerca de la lengua terminal del glaciar de Bohoyo pero sin llegar a contactar con él.
Glaciar de los Campanarios
El glaciar de los Campanarios era doble pues estaba separado por el contrafuerte central del risco de la campana y terminaba en el prado de Fuente de la redonda a 1.420 m después de un recorrido de 2,5 km.
Glaciar de las Becedillas
El glaciar de Becedillas comenzaba en la parte más ancha de la sierra llana y su lengua descendía hasta los 1.380 m.
Glaciar de las Chorreras
Finalmente el glaciar de las Chorreras comenzaba donde la garganta de Bohoyo gira al Norte, con un circo pequeño pero bien desarrollado, con paredes alpinas y un fondo plano a 1.700 m discurría su lengua hasta los 1.400 m y era el único que no llegaba hasta la garganta de Bohoyo.
Muy interesante. ¡Gracias!
ResponderEliminarDiversos estudios relativamente recientes de los especialistas en Geomorfología Glaciar presentan pruebas de la muy probable existencia de casquetes de hielo permanentes en las zonas altas y llanas del Alto Gredos y la Sierra de Béjar. De este modo, alguno de los glaciares que dibujas, por ejemplo cerca de la Sierra Llana o el Belesar, en realidad fluirían de éstos. La superficie de hielo continuo sería por tanto bastante mayor.
ResponderEliminarGracias. Información muy interesante. ¿tienes el enlace a ese estudio?
EliminarSaludos.
Tengo 58 años y he conocido todavía un pequeño glaciar en la garganta de Bohoyo, se llamaba la cocinilla, en la zona de los campanarios; en las fiestas del pueblo(agosto) se subía a por nieve helada para hacer bebidas frías, debió de desaparecer en los años 80-90 del siglo pasado; yo subí una vez y tenía un espesor de muchos metros y se veían perfectamente las sucesivas capas de hielo que lo conformaban
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