Presento a continuación el
Inventario de Glaciares Randolph,
que fue publicado la pasada primavera y consiste en un inventario digitalizado y con datos normalizados de todos los glaciares
del mundo fuera de los casquetes de hielo de la Antártida y Groenlandia.
El año pasado hice un estudio
sobre el estado actual de los glaciares Pirenaicos y me llevó varios días
de trabajo, este estudio no es tan riguroso en los límites glaciares ni en su
ubicación ni su número, pero abarca a todos los glaciares del mundo excepto las
capas de hielo de Groenlandia y la Antártida. Lo cual se me antoja una tarea
titánica, no sólo el inventario en sí. Sino el hecho de que los glaciares están
cambiando constantemente, aunque el informe es estático, es decir mide el área glaciar
en un determinado momento, de este modo permitirá poder comparar con informes posteriores.
Glaciares en Alaska, fotografía cortesía de Chus Meneses. |
1. Introducción
El Randolph Glacier Inventary
(RGI) es una colección digital que esboza de los glaciares del mundo, excluyendo
Groenlandia y la Antártida. El RGI se desarrolló en un período corto (1-2 años)
con recursos limitados con el fin de satisfacer las necesidades del Quinto Informe de Evaluación (AR5) del
Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC) para
estimaciones del balance de masa glaciar reciente y futura. Se priorizó completar la cobertura en lugar
de un extenso detalle documental. El mayor defecto del RGI es un menor
número de atributos y, una inevitable delimitación del glaciar reducida localmente
en exactitud, Se trata de un precio que vale
la pena pagar por tener una cobertura completa mundial, esencial para la
evaluación a escala global.
A pesar de los pocos atributos que considera cada esquema, algunos son
analíticamente valiosos. Por ejemplo, el atributo de tipo terminal (donde
termina el glaciar, en tierra, lago o mar) y la cobertura completa se combinan
para producir la primera estimación de la proporción global de los glaciares de
marea.
La cobertura glaciar completa
es deseable para una amplia gama de investigaciones a escala mundial. Se
requiere un conocimiento detallado de las zonas de glaciares, y en algunos
casos también un modelo de elevación digital para calcular el volumen glaciar.
Para calcular el volumen se necesitan los contornos de los glaciares para poder
estimar los cambios de volumen por comparación y altimetría, y de los cambios
de masa después de la aplicación de las apropiadas correcciones. Los contornos
también son cruciales para evaluar las proyecciones de cambio de la masa
glaciar.
2. Precisión
El reconocimiento
preciso de los glaciares en las imágenes de satélite puede ser un desafío. Los
mapas pueden ser igualmente difíciles de trabajar, ya que a veces ofrecen dificultades
adicionales como la falta de
georreferenciación. La precisión del resultado depende de la resolución y la
calidad de las imágenes o mapas fuente, de la
escala en la que el analista traza el glaciar. Por todo esto es necesaria gran habilidad en la
identificación de las superficies de los glaciares.
Pero el problema más
grande es la mala geolocalización. Hay un cambio sistemático en todos los esquemas en relación con la
imagen de satélite en el fondo (que
también muestra la cubierta de nieve estacional, una posible causa de la mala interpretación). Además
se omiten muchos glaciares, y también son
mal ubicados de forma muy
generalizada.
Resultado
del informe RGI sobre el número de glaciares inventariados y el área ocupada
por estos.
3.
Perspectivas
El Inventario Randolph,
es un esfuerzo cooperativo de la comunidad de glaciólogos, es una compilación
global completa de contornos de los
glaciares del mundo vectorizados digitalmente. Contiene contornos de casi 200.000 glaciares. Teniendo en cuenta los glaciares
actualmente omitidos del total, el número de glaciares podría ser mayor,
superando ampliamente los 400.000, pero
los glaciares que faltan representan el 1,4% o menos de la zona de glaciares evaluada, y
posiblemente mucho menos.
El área total de
glaciares se estima como 726.800 ± 34.000 km2, aunque permanecen una
serie de preguntas sobre la mejor manera de calcular la incertidumbre de este
total. El área de los glaciares en las islas que rodean el continente antártico
es 132.900 ± 2.520 km2 y la zona de los glaciares de Groenlandia excluida
la capa de hielo es 89.700 ± 4.490 km2; las regiones restantes de
glaciares contribuyen con 504.200 ± 27.000 km2 al total.
El RGI es un producto
mucho más completo que las listas nacionales
de hace medio siglo, pero es un trabajo aún en curso. Las tareas
pendientes incluyen:
- Mejorar la calidad de
los contornos donde los recientes inventarios regionales probablemente sean más precisos. Por
ejemplo, el reciente trabajo del Centro Integrado Internacional de Desarrollo y
Montaña de Katmandú, Nepal, y en China, se sabe que tienen mejor georeferenciación
y precisión que el RGI. Estos proporcionan
contornos para 3000 Glaciares, sobre
todo en el norte de Asia.
- Acortar el lapso de
tiempo de cobertura de los contornos que
tengan fechas anteriores a 1999. Además muchas fuentes proporcionan información
no fácilmente convertible a fechas
explícitas.
-El Inventario Randolph distingue
entre glaciares que terminan en tierra y glaciares que terminan en lagos. Hasta
el momento, los glaciares que terminan en lago han sido identificados como tales en sólo
tres regiones.
-La adición de contornos
a superficies glaciares cubiertas de escombros y adición de información acerca
de la topografía y su hipsometría.
Dada la necesidad de la pronta
disponibilidad del informe, se decidió no
incluir esta información en el RGI. Varios investigadores ya han explotado el
RGI como un producto estandarizado de calidad uniforme reconocida que hará reducir la incertidumbre derivada de la
utilización de diferentes fuentes topográficas, y permitirían que las capas de
hielo sean identificadas mediante el
examen de los perfiles longitudinales de
elevación de la superficie.
El RGI no se ha diseñado
para la medición de las tasas de cambio del área glaciar, para la que es
necesaria la mayor precisión posible, delineación y georeferenciación. Muchos glaciares
de RGI pasan esta prueba, pero en
general se ha dado mayor prioridad el grado de cobertura. La fuerza del RGI
reside en la capacidad que ofrece para el manejo de datos de muchos glaciares a la vez (por ejemplo, para
la estimación de los volúmenes de los glaciares
y las tasas de cambio de elevación a escalas regional y mundial y para simular las respuestas de la criosfera
al cambio climático).
Por último, queda mucho
por hacer en la investigación de la incertidumbre. El modelo de error incorpora
algunas fuentes de incertidumbre, pero tiene deficiencias a la hora de normalizar
los errores derivados de la diversidad de las fuentes y los métodos de análisis
de información. Además, el problema de la incertidumbre en el volumen de los
glaciares con estos datos es intratable.
Las mediciones de
volumen son pocas, y la comprensión de las relaciones entre volumen y las magnitudes
observables es limitada. No obstante la incertidumbre en el volumen de los
glaciares es un problema de
significación más amplia que la incertidumbre en las zonas glaciares, y merece
una atención particular.
Artículo original en Journal of Glaciology, Volume 60, Number 221, June
2014, pp. 537-552(16)
Mira qué lista más excelente de todos los glaciares mundiales que se va actualizando año tras año:
ResponderEliminarhttp://www.wgms.ch/mbb/sum13.html
Por cierto, el Glaciar de la Maladeta tiene un comportamiento positivo este año también (+78), aunque no tanto como el anterior (+390).
Gracias por el enlace. Si es cierto llevamos dos años buenos para los glaciares de Pirineos aunque los otoños están siendo terribles sobre todo este Octubre. Esperemos que sigan creciendo aunque sea poco.
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